SIN TÍTULO, 6

SIN TÍTULO



SÉ paciente, la vida 

no entrega su secreto 

a los que la tratan con brutalidad, a los que se jactan, 

a los que no saben escucharla, 

demasiado ocupados de sí mismos.


Ella 

es discreta siempre, y no por vanidad 

o cálculo, sino porque sólo en ese tono 

puede decirse lo que importa. Es 

desconfiada, y no se deja sorprender, y huye, 

no sólo ante la mano torpe del cazador, 

sino ante la avaricia 

irredimible del que la observa.


Sólo 

al que sabe callarse largamente, hacerse parte 

de su ritmo sereno, 

despreocupado y creador, lo acoge 

en su confianza, se le revela 

respetuosa y dulcemente alegre, 

e incluso alguna vez, alguna rara vez, desnuda,

Íntima.


Poema de José Cereijo

de su poemario “Los dones del otoño”.


Comentarios

Entradas populares